En el Albergue Montes de Anaga somos plenamente conscientes de que estamos en un lugar privilegiado en la isla de Tenerife.
El Parque Rural de Anaga, declarado Reserva de la Biosfera, es uno de los lugares más importantes e impresionantes de las Islas Canarias.
Esto es así gracias a los vientos alisios, que crean un microclima ideal para una flora y fauna única en la isla. Como siempre decimos, algo que caracteriza a este territorio es su gran extensión, tanto de montaña como marítima. Pues bien, hoy queremos recomendarte algunos de los sitios imprescindibles que debes visitar dentro del Parque Rural de Anaga.
Los lugares que no te puedes perder dentro del Parque Rural de Anaga
Mirador de Jardina. Te ofrece una amplia visión de Tenerife, custodiada por el Teide y con una preciosa panorámica de San Cristóbal de La Laguna.
Sendero de los Sentidos. Está compuesto por tres tamos en una ruta circular de tan solo 1,3 kilómetros que se puede hacer fácilmente en 50 minutos.
Camino viejo al Pico del Inglés. Sin duda, uno de los lugares más fotografiados del parque. Se trata de una carretera excavada en la roca que provoca un paisaje sin igual.
Mirador Pico del Inglés. Si continuamos por la parada anterior llegaremos a un mirador con vistas impresionantes, siempre y cuando no nos coincida día de niebla.
Mirador hacia Taganana. De camino hacia Taganana encontraremos algunos miradores con vistas espectaculares.
Taganana. El pueblo más cercano a Anaga que tiene un especial encanto y que, además, cuenta con playas impresionantes como la Playa de Benijo o Almáciga.
Mirador Chinamada. En sí, Chinamada es una pequeña aldea digna de visitar y su mirador le hace justicia.
Taborno. Otro pequeño pueblo que nos regala un paisaje de ensueño y unas vistas panorámicas de la costa, con el característico Roque de Taborno.
Para visitar los lugares más emblemáticos de Anaga te recomendamos alojarte en el Albergue Montes de Anaga, en pleno corazón del Parque Rural de Anaga, con todas las comodidades posibles y los ingredientes fundamentales para la desconexión en plena naturaleza.